11 de diciembre de 2013

Una filosofía que sirva para vivir mejor




 La Ingenuidad Aprendida: http://www.youtube.com/watch?v=ACQm3hZH4VY






ESTUDIOS INDICAN QUE LA MEDITACIÓN PODRÍA TENER EXPRESIONES EPIGENÉTICAS

La práctica de la meditación, aparte del beneficio psicológico, provoca una sensación de relajación física en nuestro cuerpo. Un estudio de la  Universidad de Wisconsin-Madisonha (EE.UU.) ha mostrado indicios que los efectos de este estado de abstracción mental podrían ir más allá de la distensión muscular, al generar una alteración en la expresión de nuestros genes. Se trata del primer trabajo científico en abarcar esta temática.


 Para obtener esta conclusión, el equipo analizó los efectos de un día de meditación consciente en un grupo de sujetos aficionados a dicha práctica en comparación con otro grupo de control que realizaba otro tipo de actividades silenciosas. Las observaciones mostraron una serie de alteraciones moleculares en los primeros tras el desarrollo de la actividad, en concreto una baja regulación de los genes  RIPK2 y COX2 implicados en el proceso inflamatorio, que conlleva una rápida recuperación ante una situación estresante. Los autores aseguran que se trata de una evidencia de que la práctica de la meditación desencadena alteraciones epigenéticas en el genoma. De hecho, como explica Perla Kaliman, autor principal del artículo e investigador en el Instituto de Investigación Biomédica de Barcelona (IIBB-CSIC-IDIBAPS), donde se llevaron a cabo los análisis moleculares, "los cambios más interesantes, se observaron en los genes que son los objetivos actuales de los fármacos anti-inflamatorios y analgésicos", apunta. 

Estudios clínicos previos habían sugerido que la meditación es capaz de moldear las áreas de materia gris cerebral relacionadas con la memoria, la empatía y el estrés, y desencadenar de esta forma un importante beneficio corporal.

No obstante, los expertos se muestran cautos y afirman que es pronto para ensalzar la meditación como una nueva terapia médica.

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ABEJAS Y AVISPAS PUEDEN RECORDAR ROSTROS HUMANOS

¿Recuerdas aquella abeja que le diste un manotazo y que trataste de matar, pero terminó alejandose? Cuida tu espalda, porque ella recuerda como eres. Una nueva investigación revela que ciertas avispas y abejas pueden recordar distintas características de los rostros individuales. Esto fue una sorpresa para los investigadores que no esperaban ver tales habilidades sociales avanzadas en criaturas con mentes tan diminutas.


Los seres humanos son excelentes en la identificación de personas en base a la apariencia. Otros animales, como los cuervos, se ha documentado que son seres capaces de identificar a las personas también, aunque sus cerebros son mucho más grandes y por lo general son considerados como mucho más inteligentes que las avispas. Las abejas también demostraron ser capaces de reconocer diferentes caras, incluyendo los que pertenecen a seres humanos.

Cuando estos insectos ven a un individuo (ya sea otro insecto o la persona que sólo les molestó por el balanceo de un periódico sobre de ellos), su campo de visión se divide en hexágonos de los miles de omatidios que componen el ojo compuesto. En esencia, que procesan la información en base a estos trozos de las estructuras en el ojo que actúan como unidades individuales y ponen toda la imagen en conjunto. Puede que no sea muy claro en comparación con lo que estamos acostumbrados a, ya que no tienen una pupila para regular la cantidad de luz que entra en la retina, pero es lo suficientemente bueno como para permitir que las avispas y las abejas a discernir los rasgos faciales prominentes que puede ser utilizado para la identificación.

La comprensión de cómo estos insectos son capaces de lograr este alto nivel de detección individual con un cerebro tan relativamente simple podría ser capaz de inspirar a nuevos programas de reconocimiento facial. Esta investigación fue anunciada por Elizabeth Tibbetts, de la Universidad de Michigan, quien publicó un artículo sobre estos resultados en la revista "Ethology". Su colega Adrian Dyer de la Universidad RMIT ha publicado cinco artículos de este año respecto a la visión de los himenópteros.

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LA RADIOACTIVIDAD EN NUESTRAS VIDAS

El camión con desechos radiactivos que fue robado en el estado de Hidalgo, cuando era conducido a un centro de tratamiento fue localizado en el municipio de Hueypoxtla, Estado de México, informó a Reuters un funcionario del gobierno mexicano. Sin embargo a las pocas horas de haberse suscitado el percance fue localizado el camión así como el peligroso contenido y los ladrones involucrados fueron ya detenidos. Sin embargo, surgen dudas como ¿que es la radio actividad?, ¿es común en la naturaleza hallar radio actividad?, ¿como reconocer estos materiales?, ¿que es una bomba sucia?, ¿que hacer en caso de un evento nuclear?... y pues de ahí a que me decidiera hacer un articulo tratando estos temas.


¿QUE ES LA RADIO ACTIVIDAD?
En síntesis es el desprendimiento de los componentes que integran a un átomo, es decir cuando un electrón, protón o neutrón se sueltan de su átomo de origen. La radiactividad fue descubierta en 1896 por Antonie-Henri Becquerel, quien, al hacer estudios sobre la fosforescencia de las sustancias, observó que un mineral de uranio era capaz de velar unas placas fotográficas que estaban guardadas en un cajón de su escritorio. 

RADIO ACTIVIDAD EN LA NATURALEZA



El sólo hecho de consumir un plátano ya involucra una exposición a elementos radioactivos, el cuerpo humano es en sí mismo naturalmente radioactivo... diario nos exponemos sin saberlo a diversas fuentes de radiación y no lo notamos.



Hay dos contribuyentes fundamentales a las exposiciones a la radiación natural: las partículas de alta energía de los rayos cósmicos que inciden en la atmósfera terrestre y los radionucleidos de la corteza terrestre presentes en todo el medio ambiente, incluyendo el propio cuerpo humano.

Muchas exposiciones a fuentes de radiación natural se modifican por la acción humana. En particular, se liberan al medio ambiente radionucleidos naturales en el procesado de minerales y en actividades como la producción de fertilizantes fosfatados y la utilización de combustibles fósiles, provocando incremento de las exposiciones a esta radiación natural.

Muchas personas sufren incrementos de la exposición a la radiación natural en sus lugares de trabajo, tales como las minas subterráneas, el procesado de minerales y la tripulación de aeronaves.

La relevancia de la exposición a la radiación natural se confirma por el hecho de que para la mayoría de las personas las exposiciones a la radiación natural de fondo son mucho más significativas que las exposiciones debidas a fuentes artificiales, salvo excepciones. Entre estas excepciones se pueden señalar las exposiciones médicas, los accidentes con liberación de radionucleidos y algunos lugares de trabajo específicos.


En todos los casos, sin embargo, el fondo natural de radiación forma la base sobre la que se añaden todas las demás exposiciones y es un nivel común que sirve de comparación para otras exposiciones.

GRADOS DE RADIO ACTIVIDAD

En esencia hay dos unidades que sirven para medir la radio actividad pero cada una tiene un propósito muy claro al respecto; El Sievert (Sv) y el Gray (Gy).

El sievert es una unidad derivada del SI que mide la dosis de radiación absorbida por la materia viva, corregida por los posibles efectos biológicos producidos. 1 Sv es equivalente a un julio entre kilogramo (J kg-1). Esta unidad da un valor numérico con el que se pueden cuantificar el deterioro producidos por las radiaciones ionizantes. Se utilizó este nombre en honor al físico sueco Rolf Sievert. Su diferencia con el gray (unidad de la dosis absorbida) es que el sievert está corregido por el daño biológico que producen las radiaciones, mientras que el gray mide la energía absorbida por un material.

En esta lámina se ilustran los grados categorizados en millisievert (mSv) a los que nos exponemos cotidianamente, desde  utilizar un teléfono alámbrico o viajar en avión ya constituye una exposición a este fenómeno.

BOMBA SUCIA

Uno de los conceptos que sonaron en los momentos en que los medios informativos hablaron cuando sucedió el robo del camión que transportaba material radioactivo fue de algo a lo que llamaron "bomba sucia", motivo por el cual incluso las autoridades estatales y federales se involucraron en el caso para solucionarlo en cosa de horas... ¿pero a que se referían con ese termino?

La 'bomba sucia', también conocida como bomba radiológica. Este artefacto es una bomba explosiva común (como la fabricada con dinamita) a la que se colocan materiales radioactivos para que con la explosión se esparzan por la atmósfera con propósitos contaminantes o simplemente para crear la sensación de que ese peligro puede estar presente. Por la relativa facilidad que implica su fabricación su uso por parte de grupos terroristas es temido.

En términos militares, la bomba radiológica es también una munición de artillería fabricada con uranio empobrecido que por su densidad puede fácilmente penetrar blindajes o edificaciones reforzadas, sin embargo al ser el uranio un material radioactivo y altamente contaminante, su empleo produce efectos secundarios en el personal militar que manipula estas armas o en las personas próximas a los lugares donde estos artefactos son detonados.

La Agencia Internacional de Energía Atómica (AEIA) que es un organismo multinacional especializado de la O.N.U. que entre sus labores esta el de alertar de los riesgos nucleares como lo sucedido en días pasados, el municipio de Hueypoxtla, en el Estado de México, dijo que a menos que los ladrones hubieran roto el cabezal que aislaba el cobalto 60 (lo cual si sucedió) no corrían riesgo de morir por la exposición. De acuerdo a la escala INES, este evento corresponde al número 3 un suceso conocido como "incidente grave".

PRECAUCIONES ANTE UN EVENTO NUCLEAR

Si los medios indican que ha habido "un accidente nuclear" y que "hay liberación de material radiactivo al ambiente" actúe de inmediato.

De acuerdo al nivel de gravedad del accidente ocurrido ("4", "5", "6" o "7" en la escala del INES, siendo 7 el accidente mayor) variará la cantidad y forma de desplazamiento de los materiales radiactivos que se descargaron o siguen descargando. Esa contaminación puede desplazarse por aire (siendo de gran importancia los vientos), por agua superficial (lago, río, ambos), por agua subterránea, por partículas procedentes de suelo contaminado, por alimentos o por una combinación de todas estas vías.


Dado que las condiciones meteorológicas pueden variar, con cambios en la dirección y fuerza del viento todo el año, y días calmos con "tapones de aire caliente" que atrapan los contaminantes a baja altura (sobre todo en otoño-invierno), se asume que el impacto radiológico del accidente será circular alrededor de la central nuclear, y que todas las personas ubicadas hasta cierta distancia deben poner en práctica este Plan Ciudadano.

Usted puede haber estado expuesto a materiales radiactivos contenidos en el aire, el suelo, el agua o los alimentos, que una vez ingresados a su organismo siguen descargando radiación. También puede estar expuesto a la radiación que emite el suelo, los objetos o personas contaminadas con materiales radiactivos. Los materiales radiactivos se acumulan en el organismo. La radiación que ellos producen y la radiación ionizante en general, en cambio, no se acumulan.

1. Enciérrese de inmediato.
Si se encuentra en su casa, en su trabajo o en un edificio público: quédese donde está y enciérrese en la habitación más aislada, baños por ejemplo, o si lo hubiera, en el sótano. No tome su auto porque correría riesgos y entorpecería la circulación de los vehículos de auxilio.

Si se encuentra fuera o al aire libre: entre al edificio más próximo respirando a través de un pañuelo o trapo húmedo. No se quede afuera. Allí estaría más expuesto a los riesgos. Si aún actuando con rapidez hubiera estado expuesto a la contaminación, sáquese la ropa y el calzado y colóquelos en una bolsa de plástico, llevándola luego al sitio más alejado de las personas y del ambiente habitado. Tome una ducha de agua tibia (no hirviendo) y frótese con jabón. Si usa agua procedente de un depósito que no ha estado en contacto con aire o agua contaminados, recuerde que debe conservarla para utilizarla como agua de bebida principalmente.

Si el accidente o evento ocurriera en verano, en vacaciones o durante su tiempo libre, y usted hubiese estado en malla, con la mayor parte de su cuerpo expuesto, proceda con el calzado y la ropa tal cual se indicó arriba y tome una ducha con agua tibia y frótese el cuerpo con jabón.  

Si se encuentra en su vehículo: estaciónese. Detenga el motor, déjelo con los vidrios levantados (por si fuera necesario usarlo al terminar la alerta) y entre al edificio más próximo respirando a través de un pañuelo, trapo húmedo o mascarilla. No permanezca en el auto. Allí no está seguro.

Si usted vive en una zona rural: en tanto la emergencia recién comience y no haya riesgo inmediato, trate de proteger con lonas u otro material los vegetales y el forraje expuestos. Recoja el ganado que está pastando, lleve los animales a un granero o galpón cubierto y enciérrese. Si el riesgo es inmediato, omita lo anterior y manténgase a cubierto.

No ingrese a su lugar de encierro ningún elemento u objeto que haya estado a la intemperie y que pudiera estar contaminado.

Recuerde que los perros y gatos u otros animales domésticos que hubieran estado expuestos podrían contener materiales radiactivos en su pelaje.

2. Cierre todo.
Un ambiente cerrado disminuye la eventual penetración de aire contaminado con materiales radiactivos. Cierre las puertas y las ventanas. Tape las aberturas, rendijas y caños que estuvieran en contacto con el exterior utilizando trapos mojados, papel de diario, cintas adhesivas u otros materiales.

Apague todo sistema de refrigeración, calefacción, acondicionadores y extractores de aire. Tape los agujeros que tengan contacto con el exterior (ventilación de calefones por ejemplo). Cierre las cortinas. Si los vidrios de las ventanas estuvieran rotos refúgiese en habitaciones con las ventanas intactas o en baños sin ningún tipo de ventanas ni ventilación. Elija siempre el cuarto más aislado del aire exterior.

3. No vaya a buscar los chicos a la escuela.
Sus hijos e hijas estarán más seguros en la guardería, escuela, colegio o universidad que en la calle. Las maestras y profesores conocen perfectamente las consignas de seguridad: se ocuparán de ellos y los cuidarán.  Por otra parte, si usted se movilizara, se arriesgaría inútilmente y entorpecería las tareas de socorro.

4. No telefonee. Manténgase quieto.
Definitivamente no use el teléfono para que no colapse el sistema de comunicación. Las líneas telefónicas deben quedar libres para las urgencias y los socorros. Toda la información le será comunicada por radio y televisión. Manténgase quieto y lo más calmado posible.

5. Escuche la radio y la televisión.
Cuando esté en lugar seguro encienda su radio. Lo más conveniente es una radio portátil pues puede trasladarla a cualquier sitio. También puede encender su televisor si estuviera ubicado en el lugar más aislado de la vivienda o edificio. Escuche atentamente los mensajes que emiten las autoridades. La radio y la televisión le proporcionarán datos sobre la magnitud y características del accidente, evolución de la situación, sitios más afectados, dirección del viento y consignas que usted debe respetar.

¿Por que se recomiendan pastillas de Yodo ante una eventualidad nuclear?

Todo el yodo (o Iodo) que entra en nuestro cuerpo se acumula en la glándula tiroides. Si se trata del yodo normal, el que contienen ciertos alimentos no pasa nada, no es perjudicial. Sin embargo, el yodo liberado en el caso de la planta de Fukushima en Japón, es un isótopo radiactivo del yodo (yodo 131) que al acumularse en las glándulas tiroides lo que hace es quemarla. Por eso los cánceres de tiroides se tratan con yodo 131. Si administramos yodo a nuestro cuerpo los niveles de yodo en nuestra tiroides serán altos y nuestro cuerpo tenderá a asimilar menos, es por eso que les mandan las pastillas, para incrementar el nivel de yodo no dañino y que no asimilen el radiactivo. 

6. Prepárese para resistir hasta la posible evacuación.
Prepárese para resistir encerrado la mayor cantidad de tiempo posible. No fume. Mantenga su organismo lo menos alterado posible. Solo use los alimentos que no estuvieron en contacto con el aire exterior presuntamente contaminado. Recuerde que los alimentos enlatados, los guardados en recipientes y los rodeados con filmes de polietileno u otros plásticos no pueden contaminarse con materiales radiactivos. Lo mismo sucede con bebidas que estuvieran cerradas.

Si algún alimento hubiera estado expuesto a la contaminación no lo ingrese a la vivienda o lugar de encierro. Si por razones de supervivencia debiera utilizar un alimento presuntamente contaminado, asegúrese de lavarlo con agua sin contaminar.

Solo use el agua que no haya podido recibir materiales radiactivos. Por ejemplo agua de termotanque, agua de los depósitos de inodoro, agua de botellones, líquidos contenidos en heladeras, etc. El agua de los tanques domiciliarios es relativamente segura en tanto el tanque esté aislado y no le ingrese agua de red contaminada.

De ser posible consuma alimentos ricos en antioxidantes (verduras, frutas, yogurt, pastillas antioxidantes) pues mejora dentro de su organismo el control interno de los oxidantes generados por la radiación.

Previendo una eventual escasez de alimento y agua racione lo que consume mientras dura el encierro.

Si hubiese estado expuesto a la contaminación exterior, y las indicaciones de la radio y la televisión lo sugieren, tome pastillas de Iodo (Ioduro de Potasio). Esto reduce la posibilidad de que su glándula tiroides acumule el Iodo-131 radiactivo contenido en el aire, agua o alimentos contaminados. Todas las personas –en especial mujeres embarazadas y niños- solo deben comenzar a tomar tabletas de Iodo cuando lo recomienden las autoridades. Estas son las dosis indicadas de Ioduro de Potasio.

Adultos, adolescentes y mujeres embarazadas con más de 12 años de edad: un comprimido de 130 miligramos por día.

Niños de 3 a 12 años de edad: medio comprimido por día (65 miligramos).

Niños con 1 mes a 3 años de edad: un cuarto de comprimido por día (32,5 miligramos).

Bebés, desde recién nacidos hasta el mes de edad: una octava parte de comprimido (16,25 miligramos).

Las personas con trastornos de funcionamiento de la glándula tiroides deben tomar yodo con precaución (por ejemplo hipertiroidismo). El uso de tabletas de yodo estable está contraindicado en los siguientes casos: hipertiroidismo activo, hipersensibilidad al yodo, dermatitis herpetiforme y vasculitis hipocomplementémica.

A partir de su fecha de elaboración las tabletas que son mantenidas en lugares frescos y secos conservan sus propiedades por 5 años.

Recuerde que el yodo de las tabletas solamente ayuda a protegerlo del yodo radiactivo (yodo-131), y que no lo protege de otros materiales radiactivos ni de la radiación ionizante.

No salga afuera aunque las condiciones le parezcan seguras. La radiación no se huele, no se ve ni puede tocarse.

7. Evacuación.
Si llegase a disponerse una evacuación, diríjase con su familia al punto de reunión o destino que indiquen las autoridades. Utilice su vehículo particular. Si no lo tuviera solicite ayuda a los vecinos que sí poseen movilidad. Ayude a las personas que requieren su apoyo (niños, personas con movilidad reducida, enfermos, ancianos).

Prepare un bolso con los elementos indispensables para un viaje corto (de unos pocos días), asegurándose que esos elementos no hayan estado expuesto al aire contaminado. Lleve toallas y jabones. Si se encuentra bajo tratamiento médico no olvide sus medicamentos. Asegúrese de tener sus documentos, tarjetas de crédito o débito si las tuviera y dinero para eventualidades.

Lleve botellas con agua que no haya estado expuesta a la contaminación. Si tiene pastillas de yodo llévelas con usted.

Las familias que tengan lactantes deben llevar la leche en polvo que están utilizando mientras no haya estado expuesta al aire contaminado.

Ante de abandonar su hogar o el edificio donde se encuentra asegúrese de dejar todo cerrado. No deje prendidos artefactos eléctricos, ni aire acondicionado ni calefactores.

Siga las mismas precauciones que utilizó al ingresar. En la medida de lo posible desplácese sin tocar los objetos y superficies localizadas a la intemperie, y cúbrase boca y nariz con un pañuelo, con un trapo húmedo o con una mascarilla. Es recomendable llevar vestimenta que cubra todo el cuerpo y sombrero, gorra u otro elemento para cubrir parcialmente la cabeza. Si llueve es muy importante usar el paraguas pues la lluvia podría estar contaminada con materiales radiactivos.    

Al desplazarse con el vehículo asegúrese de tener cerrado el aire acondicionado, ventilador o calefactor del vehículo. Cierre todas las ventanillas del auto. Mantenga la calma y maneje con cuidado.

Al llegar al sitio de evacuación las autoridades indicarán los procedimientos y podrán eventualmente medir la radiactividad en ropas, objetos y alimentos. En función de las lecturas de radiactividad le indicarán cuáles son los pasos a seguir.  

8. Fin de la Alerta o Emergencia.
Cuando el riesgo de contaminación haya disminuido lo suficiente las autoridades indicarán el cese del encierro. Se considera que esto ocurre cuando el reactor o depósito de residuos radiactivos ha dejado de emitir materiales radiactivos al ambiente.

Sin embargo, recuerde que el ambiente situado fuera de su sitio de encierro puede tener contaminantes radiactivos, en especial el suelo, el agua y los alimentos expuestos, los objetos y las superficies de las construcciones. Si se desplaza muévase lentamente, no toque los objetos y superficies ni genere movimientos importantes del suelo. No se siente en el césped ni sobre el suelo, no utilice piletas de natación descubiertas ni consuma frutas y legumbres que hayan estado a la intemperie.

Si llegase a necesitar movilizarse en su auto, haberlo dejado con los vidrios levantados redujo seguramente el ingreso de contaminantes radiactivos. Al ponerlo en marcha y desplazarse hágalo con los vidrios levantados y anulada la calefacción, ventilación o aire acondicionado. Circule lo más lentamente posible para reducir la dispersión de material contaminado.    

Prepárese para un eventual accidente o evento nuclear

Asegúrese que haya copias de este documento en distintos lugares de la vivienda o institución. Pegue o coloque copias de las consignas en lugares fácilmente visibles ("Plan Ciudadano: consignas para actuar"). Deben estar protegidos del agua, del Sol y del roce mecánico.    

Identifique en su casa o lugar de trabajo la habitación más aislada del aire exterior. Verifique que tenga suficiente espacio para usted y quienes pudieran acompañarlo. Asegúrese que todos conozcan la existencia de esta habitación de seguridad.

Mantenga siempre en esa habitación trapos que puedan ser humedecidos y agua. También una linterna.

Trate de tener siempre cerca un receptor de radio portátil. Verifique que tenga sus baterías en condiciones.

Si es responsable de un negocio, escuela o edificio donde normalmente hay muchas personas, adapte estas consignas de seguridad para que todos se beneficien. Identifique las habitaciones o ambientes de seguridad.

Logre un máximo aislamiento de su casa y oficina, o de la escuela y edificios públicos. Aplique burletes y otros dispositivos para frenar cualquier penetración de aire contaminado con materiales radiactivos. Mejore el cierre de puertas y ventanas. Aísle perfectamente del aire exterior su tanque de agua.

Identifique los sitios donde existen alimentos y agua que no serían contaminados por una nube radiactiva que pasase sobre la vivienda.

Tenga pastillas de yodo (no radiactivo) para tomarlas en caso de contaminación con yodo radiactivo. Vigile su fecha de vencimiento. Deje anotadas las dosis aconsejadas y las precauciones.

Haga simulacros de accidente y ponga a prueba todas las consignas. Practique una eventual evacuación con su vehículo, si lo tiene, o bien coordine el ensayo con vecinos que sí lo tengan. Toda la familia debe participar de este simulacro. Detecte las fallas que cometen. Traten de enmendarlas en conjunto.

Fuentes:
http://www.csn.es/index.php?option=com_content&view=article&id=4234&Itemid=242&lang=es
http://www.muyinteresante.com.mx/historia/332298/bomba-sucia-radiologica/
http://www.funam.org.ar/planciudadano.htm
Para saber más visiten:
http://energia-nuclear.net/definiciones/radioactividad.html
http://es.wikipedia.org/wiki/Materiales_Radiactivos_de_Origen_Natural

LA ENFERMEDAD MÁS INFECCIOSA DE TODAS

Mi primer investigación como el nuevo Oficial de Servicio de inteligencia epidémica (EIS) con los Centros para el control de las enfermedades fue un brote grande de sarampión, más que todo entre niños hispanos, muchos menores de un año de edad, y muchos quienes se habían infectado cuando visitaban las salas de emergencia de los hospitales por otras razones.


Nunca olvidaré lo nervioso que estaba. Quería hacer un buen trabajo por esos niños, sus familias y todos los que los rodeaban. Estos infantes eran muy jóvenes para ser vacunados, y como resultado de ello eran muy susceptibles. Así que vacunamos a los que estaban a su alrededor para detener la transmisión.

Para el año 2000, una década después de mi experiencia EIS, la transmisión de sarampión en los Estados Unidos fue declarada detenida. Sin embargo, todavía tenemos grupos aislados de sarampión en niños sin vacunar, a raíz del ingreso del sarampión a los Estados Unidos de otras partes del mundo.

Usualmente hay alrededor de 60 casos de sarampión en los Estados unidos en un año dado. Pero este año se reportaron 175 casos en los primeros 11 meses; todos ligados a personas que ingresaron el sarampión a los Estados Unidos desde el extranjero.

Aunque la mayoría de nosotros no nos damos cuenta porque es tan raro en nuestro país, el sarampión es una enfermedad grave. A nivel mundial, en promedio, cada 18 horas mueren 430 niños por sarampión y sus complicaciones.


El sarampión es tan contagioso que si una persona está infectada, 9 de 10 personas cercanas a esta persona, que no estén inmunizadas, también serán infectadas.

El mundo conectado de hoy significa que todos estamos conectados por el aire que respiramos, el agua que bebemos y por los alimentos que comemos. Viajar por el mundo acelera el índice al cual las enfermedades infecciosas amenazan y pueden llegar a colocarse en la puerta de tu casa, así como el sarampión.

Algunas personas creen que las enfermedades infecciosas ya no son un problema en el mundo industrializado. Pero la realidad es que las enfermedades infecciosas continúan entre nosotros. Es por ello que la prevención es clave.

La amenaza del sarampión sería mucho más grande en los Estados Unidos si no fuera por el desarrollo de la vacuna contra el sarampión y su amplia distribución en los programas de inmunidad infantil a nivel mundial.
Esta semana celebramos el 50 aniversario de su creación.

Desde al año 2001, una asociación mundial, que incluye a los CDC, ha vacunado a más de un mil millones de niños. En la última década, estos programas de vacunación han evitado más de 10 millones de muertes.

El esfuerzo mundial para prevenir la muerte por sarampión dejará atrás una infraestructura global importante que continuará forjando un mundo más seguro. Estas mejoras en el extranjero, tal como el fortalecimiento de los sistemas de laboratorio y vigilancia, capacitar detectives de enfermedades y construir instalaciones para investigar los brotes de la enfermedad, hacen del mundo, y de los Estados Unidos, un lugar más seguro y más sano.

El sarampión está a un viaje de avión. Puede llegar a Estados Unidos con los pasajeros estadounidenses de otros países. Debemos continuar vigilando la transmisión del sarampión, aquí en casa. Los padres deben proteger a sus hijos al asegurarse que tengan las dos dosis de la vacuna contra el sarampión. Todos debemos estar seguros que estamos al día con nuestras vacunas, en particular cuando vamos a viajar al extranjero.

Estos pasos protegerán a los Estados Unidos del sarampión hasta que el mundo llegue a ser un mundo libre del sarampión.

Escrito por:  
Dr. Tom Frieden; Director de los Centros para el control y prevención de las enfermedades 

Fuente: